martes, 7 de julio de 2009


Estoy en la escena cuatro de mi vida, tratando de enrollar la cinta para que la película quede muy espelusnante. Por ejemplo, el otro día me caí al barro y pude nadar en él, no sabía que sería necesario pero finalmene me causó sonrisas. Más tarde me encontré con un perro de la calle, se veía infeliz, pero movía la cola y mis pensamientos se volvieron a reir.
Por fin estaba a punto de comprar la conclusión de mi vida, pero un gato arañó mis ojos y de pronto apareció el día nublado que tanto amo y descubrí que te conocí antes que a mí.

1 comentario:

  1. me gusto este escrito, se puede recorrer esta secuencia e imaginar plasmado lo dicho mas que en un cuadro, quiza en otro formato aun no inventado...

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