viernes, 18 de diciembre de 2009


Está bien, no tengo para echar marcha atrás, no tengo ni calcetines puestos para correr en caso de emergencia, en ese caso, tampoco tengo los zapatos. Siento que no estoy en una perdición al desastre, ahore recientemente estoy poniéndome los guantes.-

Brevemente explico que nunca he necesitado la sensatés, doy rastros de antipatía. Tomo mi tiempo para hacer absolutamente nada, absoluto donde no cabe ninguna otra posibilidad. Ahora lo tomaré para terminar algo que necesito ver listo, me avisaré cuando vuelva a estrujar el corazón.

1 comentario:

  1. Indicando los trajes de etiqueta, aturdidamente los caminos se dirigen la palabra en el mar de la conciencia. Sin embargo, los ojos se ramifican sin dudar de las mesas de centro, porque los remolinos saben donde anidar en caso de emergencia.

    ResponderEliminar

Diríjame la palabra

Textos anteriores